2024 fue el año de las siete magníficas: ¿Quiénes triunfarán en 2025?
Este año las grandes tecnológicas han mostrado un desempeño histórico pero eso estaría cambiando. El próximo, el liderazgo continuaría en la inteligencia artificial, pero en compañías de software, ciberseguridad, utilities, farmacéuticas, biotecnología y servicios financieros.
Por: Antonia Eyzaguirre | Publicado: Viernes 25 de octubre de 2024 a las 21:29 hrs.
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Mucho se ha escuchado hablar este año de las siete magníficas, las principales compañías tecnológicas que cotizan en la bolsa de Estados Unidos y que han impulsado los rendimientos bursátiles en 2024. ¿Quiénes son? Nvidia, Alphabet (matriz de Google), Microsoft, Meta, Amazon, Apple y Tesla. En julio muchas de estas compañías tuvieron un desempeño histórico, y en las últimas semanas algunas de estas empresas han mostrado resultados positivos en la bolsa estadounidense. Pero algo pareciera estar cambiando.
Hace algunas semanas, una firma llamada Broadcom, para muchos una desconocida empresa de hardware y software, destronó a Tesla, del polémico Elon Musk, del selecto grupo de las magníficas, alcanzando una valorización de US$ 851.000 millones. Esto fue considerado para muchos como una muestra de lo movido que está el mercado tecnológico, especialmente entre las empresas de mayor capitalización bursátil. De hecho, este jueves Tesla nuevamente sorprendió al subir sus títulos más de un 20% alcanzando una capitalización bursátil de US$ 883.5000 millones, recuperando su posición.
Pese a esta remontada, en Wall Street ya es un hecho que entre estas compañías han comenzado a observarse caminos y resultados diferentes. La pregunta que empieza a surgir ahora es: si 2024 fue el año de estas siete magníficas, ¿qué viene para el 2025?
IA, pero diferente
La Inteligencia Artificial está siendo y seguirá siendo el principal factor que impulsará a los mercados. En eso hay consenso. El dilema ahora está en qué tipo de compañías comenzarán a tomar el liderazgo en este sentido.
Para Axel Christensen, director de estrategia de inversiones para América Latina de BlackRock, lo que se ha visto en 2023 y 2024 es el liderazgo de empresas ligadas al desarrollo de la infraestructura necesaria para que el proceso de transformación de inteligencia artificial tome lugar, como semiconductores o almacenamiento de datos en la nube, que incluye varias de las tecnológicas conocidas como las magníficas. Sin embargo, dice, “para el 2025 vemos que la estrategia enfocada en IA se expande a otros sectores, así como otros espacios dentro del sector tecnología. Entre estos últimos destacan software, que incluye a las empresas que desarrollan aplicaciones utilizando las capacidades desarrolladas de IA; y ciberseguridad, dado lo crítico que se vuelve la privacidad y seguridad de los datos en empresas que adoptan IA”, indica.
Agrega que, en cuanto a otros sectores, ya es posible destacar también el buen desempeño que ha tenido el sector de utilities, que incorpora a empresas que suministran energía eléctrica a los centros de procesamiento de datos de IA, que consumen hasta cinco veces más que los de procesamiento tradicional. Por otro lado, también se ve un mayor liderazgo por parte de empresas de sectores que empiezan a utilizar IA para mejorar sus ventas y/o reducir sus costos, logrando aumentar sus utilidades a través de mejoras de productividad. “En ellos destacamos el sector de salud, en particular las empresas farmacéuticas y de biotecnología, que requieren de un uso muy intensivo del análisis de datos en el proceso de desarrollar nuevos productos. Asimismo, el sector de servicios financieros se sitúa como una industria que se verá beneficiada por el incremento de productividad en sus operaciones y por reducir los costos de atención a clientes y desarrollo de productos”, señala Christensen.
Jorge Tolosa, operador de renta variable de Vector Capital, tiene una opinión similar respecto al peso de la inteligencia artificial en los rendimientos bursátiles del próximo año. Señala que la inteligencia artificial ha tenido una penetración profunda en todos los aspectos de la economía y la sociedad, por lo que todavía tiene mucho campo: “Creo que aquellas empresas como Nvidia y los clientes de ella y quienes dependen de ella, y que están dentro de las 7 magníficas porque están interrelacionadas con el negocio ya sea como proveedores o clientes, van a seguir mandando”, dice.
Más allá de la tecnología
Cristián Cavada, jefe de asset allocation y fondos balanceados de Santander Asset Management, señala que si bien este año se han visto crecimientos de utilidades muy fuertes en el sector tecnológico reforzado gracias a la irrupción de la inteligencia artificial, en 2025 ven que gran parte de esas buenas noticias provenientes de las nuevas tecnologías e IA ya se han ido incorporando en el precio. El ejecutivo indica que las expectativas de los inversionistas son cada vez más exigentes y han elevado la vara, por lo que cada vez se hace más difícil sorprender al mercado con sorpresas positivas.
Dice que, adicionalmente, otros sectores de la economía americana comenzarán a mostrar una recuperación en sus utilidades, por lo que probablemente se verá que el diferencial de crecimiento contemplado durante 2024 será bastante menor durante el próximo año. “Esperamos que el resto de los sectores, que han quedado rezagados durante 2024, tengan un mayor protagonismo durante 2025. Por lo mismo, recomendamos buscar una mayor diversificación dentro de la bolsa americana y no concentrarse mayoritariamente en el sector tecnológico”, señala. Y agrega que un entorno de tasas menos restrictivas con un crecimiento económico moderado, pero manteniendo una baja probabilidad de recesión, es un ambiente favorable para buscar una mayor rotación hacia empresas de menor capitalización o small caps.
Incertidumbre afectaría la bolsa
Para Christensen, de BlackRock, el escalamiento de los riesgos geopolíticos podría afectar la disposición de los inversionistas para tomar riesgos. “En particular, la crisis en Medio Oriente podría incidir en los precios de energía, que a su vez podría redundar en mayor inflación y un cambio en la tendencia esperada de las tasas de interés. Con ello, podría observarse una corrección en los precios de las acciones estadounidenses”.
Para Tolosa, en tanto, la mayor incertidumbre tiene que ver con la elección presidencial en Estados Unidos. Indica que, si bien por un lado se ve a la demócrata Kamala Harris como una continuidad y por lo tanto no genera mucha incertidumbre, el caso de Trump es distinto. Señala que, si el republicano lleva a cabo medidas proteccionistas, podría aumentar el valor de productos que se importan, afectando la tendencia a la baja que ha mostrado la inflación y generando que la Reserva Federal no hiciera movimientos en la tasa de interés. Asimismo, advierte, si Trump lleva a cabo una rebaja importante en los impuestos, generaría un aumento en el déficit fiscal y un alza en el gasto, lo que podría ser un elemento inflacionario. Todo esto, sumado a informes que indican que las utilidades extraordinarias de las siete magníficas tenderían a ralentizarse en el tiempo, y tendría un efecto en la bolsa. Tolosa señala que con las proyecciones de hoy, en 2025 deberían verse beneficiadas empresas como las automotrices, las de consumo interno y las de utilities.
Cavada, de Santander, indica también que una dinámica inflacionaria más persistente de lo esperado representaría un riesgo importante para el futuro de la bolsa americana, así como también un deterioro más pronunciado en el mercado laboral podría implicar un incremento en la probabilidad de recesión impactando negativamente a la bolsa.
Recomendación de inversión
El hecho que la Reserva Federal de Estados Unidos suba, mantenga o baje la tasa de política monetaria debería tener efecto. Sin embargo, Christensen explica que muchas de las empresas ligadas a la inteligencia artificial se muestran resilientes a estos cambios, debido a sus fuertes balances y altos márgenes de sus operaciones, como es el caso de Microsoft y Apple.
Para 2025, como estrategia de inversión, el ejecutivo recomienda una “adecuada combinación de empresas que se beneficien de IA, tanto tecnológicas como de otros sectores como se menciona anteriormente, con un foco especial en empresas de “mayor calidad”, en referencia precisamente a las que cuentan con mayor resiliencia financiera para enfrentar cambios en el escenario de riesgo, ya sea internos (como consecuencia del resultado electoral de Noviembre) como externos, de carácter geopolítico”, dice.
Por su parte, Cavada, de Santander, explica que si bien el recorte de tasas por parte de los bancos centrales han permitido que la renta fija anote retornos muy positivos y elevados, “hoy tenemos preferencia por renta variable por sobre la renta fija. Dentro de la renta variable, vemos con muy buenas perspectivas a las bolsas latinoamericanas y, particularmente, a la bolsa chilena”, dice.